Se ha trabajado con todo el empeño para cumplir con el compromiso histórico de construir una nación próspera

Durante estos 4 años de intenso trabajo legislativo se han aprobado las reformas que han dado acompañamiento al proyecto de transformación abanderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Se ha trabajado con todo el empeño para cumplir con el compromiso histórico de construir una nación próspera, justa e incluyente para todas y todos los mexicanos que han depositado su confianza en las senadoras y las senadores.

Importantes reformas se han discutido y aprobado en materia de derechos humanos, salud, seguridad, economía soberanía energética, educación, paridad de género, atención a grupos vulnerables, medio ambiente, cultura, movilidad y democracia, todos ellos en favor de las familias mexicanas.

Con el propósito de impulsar el desarrollo social y la atención a la pobreza y la marginación, se elevó a rango constitucional los programas sociales dirigidos a las personas más desfavorecidas; se creó el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI); se prohibió la condonación de impuestos y la prioridad ha sido el combate a la corrupción.

Entre los logros legislativos se menciona la aprobación de una nueva reforma educativa; se incluyó el principio de paridad en todos los poderes y órdenes de gobierno; se logró la revocación de mandato de los gobiernos que no satisfagan las expectativas del pueblo, así como la participación ciudadana a través de la consulta popular.

Aprobamos, igualmente, la creación de nuevas leyes, como la legislación secundaria para la implementación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, T-MEC; las leyes reglamentarias en materia educativa; la Ley Orgánica del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral; la Ley de Fomento a la Confianza Ciudadana y la Ley de Amnistía.

Además, se aprobaron diversas reformas de gran trascendencia para nuestra soberanía, sobre la Ley de la Industria Eléctrica, la Ley de Hidrocarburos y  la Ley Minera, con las cuales recuperamos la soberanía energética de nuestro país, reconociendo al litio como patrimonio de la Nación con la rectoría del Estado garantizando la protección del medio ambiente y promoviendo el combate frontal a la corrupción en esos sectores, así como la gran oportunidad de generar riqueza para el desarrollo de nuestro país a través de la exploración, explotación y manejo de ese mineral estratégico.

Si bien los sectores de la economía están teniendo una recuperación económica, aún tenemos varios retos legislativos encaminados a propiciar condiciones de competencia macroeconómica, fiscal y de gobernabilidad para estimular la mayor inversión.

Se deben redoblar esfuerzos para ofrecerle un mejor futuro a nuestras generaciones presentes y venideras; por ello, hay que seguir avanzando para que las políticas económicas, comerciales, laborales y sociales, se traduzcan en mejores condiciones de bienestar y desarrollo para todos.