El tratamiento de aguas residuales para su reutilización se ha convertido en una opción factible para la disminución de los problemas de escasez de agua; incluso el Banco Mundial lo ha considerado un recurso valioso.

Las aguas residuales son aquellas que han sido utilizadas en viviendas, poblaciones o zonas industriales, así como en la ganadería; cuya calidad se ha visto afectada por sustancias que la contaminan.

Para ello existe el tratamiento de las mismas, que consiste en un proceso mediante el cual se convierte a esos contaminantes en sustancias que pueden ser reintegradas al ciclo del agua y así poder reutilizarse para otros propósitos debido a que sus problemas ambientales son mínimos, es decir, es una forma de recuperar el agua que ha sido usada a fin de emplearla para nuevos fines.

Este proceso de reciclaje de aguas residuales data desde la antigua Grecia, sin embargo, con el paso del tiempo ha ido evolucionando gracias a la tecnología y conocimientos que permiten contar con mejores sistemas de saneamiento y tratamiento de éstas.

El cuidado del agua depende en gran medida de todos los habitantes de este valioso lugar llamado Planeta, sin embargo, considero que desde el quehacer legislativo se debe contribuir en el fomento del tratamiento de las descargas industriales y domésticas; por ello presenté una iniciativa en la cual se propone considerarlo como uno de los principios que fomentan la política hídrica nacional.