Como lo menciono en ese capítulo de mi libro, en Puebla el tema del cuidado de la calidad de aire se ha convertido en un problema que afecta la seguridad pública, además de que posterior a la pandemia ocasionada por el COVID 19, las condiciones en la calidad del aire no fueron favorables para la reanudación de las actividades cotidianas en 2022.
A pesar de que en los últimos años se han incrementado 19 áreas naturales protegidas que cuentan con respaldo federal, no se ha podido terminar con el problema de los incendios forestales, el cual es uno de los principales problemas al medio ambiente, así como el problema deforestación.
Entre las soluciones que propongo se encuentran la de fortalecer los programas para la prevención de incendios, fortalecer el programa de verificación vehicular respecto a su nivel de eficacia y eficiencia, implementar en los Estados la réplica de programas federales en pro del medio ambiente.
Sin embargo, también es muy importante erradicar la corrupción en este tema, fortalecer la red de monitoreo atmosférico, pero sobre todo, comenzar por realizar una estrategia para la promoción de conciencia respecto al cuidado del medio ambiente y la importancia que tiene en nuestras vidas.
De estas problemáticas deriva mi inquietud por el cuidado del medio ambiente y la necesidad de presentar iniciativas como la del planeta, la del cuidado del agua y la de estudios de contaminación atmosférica.