El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec constituye uno de los proyectos regionales más importantes de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, que promueve las inversiones en infraestructura y el desarrollo económico del sur-sureste.
El Corredor Interoceánico forma parte de Programa para el Desarrollo del Istmo de Tehuantepec, el cual tiene como objetivo impulsar el crecimiento de la economía regional con pleno respeto a la historia, la cultura y las tradiciones del Istmo oaxaqueño y veracruzano.
Se trata de un proyecto que aprovecha la posición del Istmo para competir en los mercados mundiales de movilización de mercancías, a través del uso combinado de diversos medios de transporte; estamos hablando de un proyecto que tendrá un impacto en la economía de México de hasta 5% del Producto Interno Bruto (PIB).
En este marco, se moderniza el ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz, y Salina Cruz, Oaxaca, para que puedan ofrecer servicios de carga, transporte, almacenaje, embalaje y servicios logísticos diversos; se fortalece la infraestructura carretera y de caminos rurales y la red aeroportuaria, y se construye un gasoducto para abastecer a empresas y consumidores domésticos.
El Corredor Interoceánico se creó como un organismo descentralizado, a través de dos proyectos paralelos: parques industriales, que tienen por objetivo atraer empresas e inversiones para el desarrollo económico de la región, y servicios de administración portuaria con interconexión ferroviaria en los puertos de Salina Cruz (Oaxaca) y Coatzacoalcos (Veracruz).
El corredor conectará nuestro país con Estados Unidos, América del Sur, Asia y Europa, además de constituir una gran base industrial en la región, ya que en el Istmo de Tehuantepec convergen más de 70 empresas de relevancia nacional, regional y global, concentradas en sus cuatro zonas metropolitanas de industrias como: petroquímica, química, plásticos, insumos para la construcción, alimentos procesados y bebidas.
Además, impulsará las vocaciones de la región. Las vocaciones del corredor están alineadas a la política industrial y aquellas que fueron definidas por la correlación entre la infraestructura, recursos naturales y las capacidades productivas de la zona.
El corredor contempla el establecimiento de 10 Polos de Desarrollo para el Bienestar en una región que conecta el golfo de México y el océano Pacífico, a través de 304 km de vía ferroviaria; el objetivo es impulsar un entorno atractivo de negocios y elevada calidad de vida en el sur-sureste del país, aprovechando la importante infraestructura multimodal con la que cuenta la región, que incluye carreteras, puertos, aeropuertos y ferrocarril, y que, adicionalmente, contará con incentivos fiscales, ventanilla única para orientación a inversionistas e infraestructura competitiva.
En el marco de mi visita al Corredor Interoceánico pude constatar que se trata de un polo de desarrollo que atraerá importantes industrias, que impulsará la generación de empleos, la economía y la transformación de la región del Istmo de Tehuantepec.
En el Grupo Parlamentario de Morena en el Senado celebramos los grandes avances de este proyecto que impulsa el desarrollo de la región del Istmo y el sur-sureste de nuestro país con una visión integral, sostenible e incluyente para todas y todos los mexicanos.