En la era digital, donde la tecnología se ha vuelto indispensable en la vida cotidiana, su impacto en la sociedad ha sido tan positivo como negativo. A medida que las nuevas herramientas tecnológicas facilitan el desarrollo de actividades y fortalecen la comunicación, también surge la urgente necesidad de establecer un marco legal o regulatorio para prevenir el mal uso de estas tecnologías.

En este contexto, se observa una creciente preocupación por los ciberdelitos, especialmente aquellos dirigidos contra mujeres, niñas y adolescentes. La violencia digital, que abarca desde acoso y amenazas hasta la difusión no consensuada de contenido íntimo, ha llevado a muchas mujeres a retirarse del espacio digital, limitando así su derecho fundamental a navegar con seguridad.

Ante esta problemática, durante el periodo ordinario de sesiones presentaré una iniciativa de reforma a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, con que se busca combatir los ciberdelitos, protegiendo a las mujeres de agresiones en el mundo digital, para garantizar así su derecho a una experiencia en línea libre de violencia.

Hasta el momento, 28 entidades han aprobado normativas en defensa de los derechos de la mujer, un ejemplo claro es la Ley Olimpia. Estas normas buscan convertir los diferentes tipos de violencia digital en delitos sancionables en todo el país.

La violencia digital se traduce en actos de acoso, hostigamiento, amenazas y difusión no consensuada de contenido íntimo mediante el uso de tecnologías. Además, promueve estereotipos sexistas, apología de la agresión contra las mujeres y permite la difusión de discurso de odio sexista y discriminación de género.

La Ley Olimpia establece sanciones severas, incluyendo penas de prisión de tres a seis años y multas de 500 a mil Unidades de Medida y Actualización (UMA), valoradas en 89.62 pesos diarios según el INEGI en 2021. Estas medidas buscan disuadir y castigar a quienes perpetúan la violencia digital.

Es fundamental reconocer que las mujeres merecen condiciones de equidad en todas sus actividades, así como el derecho a igualdad de oportunidades y certeza jurídica. Es lamentable que la violencia digital sea una constante, impidiendo que las mujeres desarrollen sus actividades personales, laborales o educativas a través de internet.

En última instancia, la adopción de medidas legislativas como las propuestas en la reforma a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y la Ley Olimpia, es crucial para construir un entorno digital seguro y equitativo para todas las personas, independientemente de su género.

  • Las mujeres tienen el derecho a un entorno digital seguro para el desarrollo de sus actividades

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2024-02-01T09:36:41-06:00
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