Las cifras de la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT 2018), no son alentadoras en materia de la salud con la que contamos las y los mexicanos; en nuestro país del total de adultos de 20 años y más, 39.1% tienen sobrepeso y 36.1% obesidad (75.2%), mientras que en el caso de los niños de 0 a 4 años 22.2% tiene riesgo de sobrepeso y los de 5 y 11 años 35.6% muestran esta condición.
Los problemas de obesidad que desencadenan en diabetes, hipertensión y enfermedades cardiacas deben poner a la sociedad en alerta y, nos obliga a tomar cartas en el asunto en la trinchera que nos corresponda.
Si bien es cierto que la pandemia por COVID 19 nos sacudió ante el impacto en el deceso de miles de personas, lo cierto es que los problemas de sobrepeso, en este momento, representan la prioridad para generar condiciones de bienestar y calidad de vida.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1975, “la obesidad se ha casi triplicado en todo el mundo, en 2016 más de 1900 millones de adultos de 18 o más años tenían sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos.
41 millones de menores de cinco años tenían sobrepeso o eran obesos y 340 millones de niños y adolescentes (de 5 a 19 años) presentaban la misma condición”.
Y si hablamos de lo que cada país destina en esfuerzos al combate de la obesidad para la prevención de enfermedades mortales, nos encontramos que tan solo los países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) OCDE, dedican apenas el 8.4% de su presupuesto total en salud al tratamiento de problemáticas relacionadas con la obesidad.
Y más grave aún que de ese padecimiento que está detrás del 70% de todos los costos de tratamientos relacionados con la diabetes, se encuentran los gastos de las enfermedades cardiovasculares y del cáncer.
No es de sorprendernos que, en el caso de México, las principales causas de defunción estén relacionadas con enfermedades del corazón, la diabetes y tumores malignos, padecimientos asociados con el sobrepeso y obesidad.
Desde el Senado de la República seguiremos legislando a favor de la salud y el bienestar, promoviendo medidas que fomenten los hábitos alimenticios saludables y las activaciones físicas que contribuyan al cuidado de nuestro cuerpo; no hay que olvidar que mente sana en cuerpo sano.