Nuestro planeta está atravesando por una situación compleja en cuanto a su conservación y cuidado. Son diversos factores los que están afectándolo,
sin embargo, es vital lo que nosotros como habitantes podemos hacer para su preservación.
Entre las soluciones que los expertos han creado, se encuentra el desarrollo de energías limpias, el cual es indispensable para combatir los estragos causados por el cambio climático y limitar sus devastadores efectos; pero más importante es realizar reformas que respalden este desarrollo.
Las energías limpias, son aquellas que, por su origen, modo de obtención o de utilización, no producen efectos indeseables en el medio ambiente.
Son sistemas de producción de energía que excluyen cualquier tipo de contaminación, principalmente por emisión de gases de efecto invernadero, causantes del cambio climático.
Considerando el incremento de la población mundial y que esto propiciaría un aumento en la demanda energética mundial. Y, por otro lado, que el sector del transporte público es el responsable del 40,2% del consumo de energía final en nuestro país, que el 43% de la energía proviene de recursos fósiles y el 97,5% de los gases de efecto invernadero se origina por coches, autobuses y camiones. Estos provocan exceso de contaminación y, al ser la opción de movilidad usada por la mayoría de los habitantes, es necesario dar solución mediante la movilidad a través de energías limpias.